El salto de Keet no fue un salto cualquiera, ya que se precipitó desde el puente Bloukrans, en la provincia sudafricana del Cabo Oriental, situado a 216 metros de altura y uno de los más altos del planeta.
"Fue demasiado corto", dijo Keet tras ser desenganchado del arnés, decepcionado por lo rápido que había finalizado esta experiencia extrema.
Junto con el anciano deportista estaba su hija y también su nieta, además de un auditor legal especialmente desplazado para registrar la hazaña de Keet.
Keet es aficionado a los deportes de riesgo y empezó a practicar "rafting" o paracaidismo cuando había superado la barrera de los ochenta años.
Fuente: http://www.mdzol.com/nota/202675/
"Fue demasiado corto", dijo Keet tras ser desenganchado del arnés, decepcionado por lo rápido que había finalizado esta experiencia extrema.
Junto con el anciano deportista estaba su hija y también su nieta, además de un auditor legal especialmente desplazado para registrar la hazaña de Keet.
Keet es aficionado a los deportes de riesgo y empezó a practicar "rafting" o paracaidismo cuando había superado la barrera de los ochenta años.
Fuente: http://www.mdzol.com/nota/202675/
No hay comentarios:
Publicar un comentario