sábado, 11 de mayo de 2013

MEDIDAS DE AUTOCUIDADO PARA FAVORECER EL SUEÑO ADECUADO EN EL ADULTO MAYOR




A-     Levántese y acuéstese todos los días a la misma hora, aún durante los feriados y fines de semana de acuerdo a una rutina preestablecida, sin alterarla salvo circunstancias muy necesarias.

B-      Condicionarse mentalmente a dormir para dormir.

C-      Use la cama sólo para dormir. No sirva comidas en la cama.

D-     Elimine las siestas diurnas excesivas a menos que estén indicadas.

E-      Evite en lo posible el estrés y las emociones fuertes.

F-      Haga ejercicios, pero no cerca de la hora de dormir.

G-     Realice técnicas de relajación, así como respiratorias.

H-     Si le es posible, pase un tiempo fuera de la casa para aumentar la exposición a la luz del sol, aproximadamente 30 minutos.

I-        Consuma una dieta liviana por las noches.

J-       Evite el consumo de estimulantes

K-      Disminuya la ingesta de líquidos después de la cena y miccione antes de ir a dormir, para ayudar a disminuir la interrupción del sueño provocada por la necesidad de orinar.

L-       Si se acuesta y no logra dormir durante 30 minutos, debe levantarse y realizar alguna actividad y se encuentre cansado y pueda dormir.

M-   Ingiera una bebida caliente si despierta en las noches por hambre, esto le ayudara a dormir. La disminución de la glicemia durante la noche puede provocar despertares con sensación de hambre.

N-     Evite cambios bruscos de ambiente, pero el cambio de lecho ayuda a conciliar el sueño cuando se está insomne.

O-     Condicione un ambiente adecuado para dormir.

P-      Lea, escuche música, vea películas adecuadas, medite, rece antes de dormir, pero no se fatigue demasiado. Estas son actividades relajantes y placenteras que ayuda a fomentar el sueño.

Q-     Evite el uso de medicamentos para dormir sin indicación médica. Use infusiones de cedrón, manzanilla y tilo, consuma manzanas.

R-      Cuando las medidas anteriores no surten efecto o el adulto mayor, por su estado mental, no es capaz de realizarlas, es necesario consultar al médico para el tratamiento adecuado.
 




Fuente :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo IX"
-Cartilla 9 "AUTOCUIDADO DEL SUEÑO EN LAS PERSONAS ADULTAS MAYORES"

viernes, 10 de mayo de 2013

EL SUEÑO EN EL ADULTO MAYOR



Mucha gente cree que las personas adultas mayores necesitan dormir menos. Sin embargo, lo que disminuye con la edad no es la necesidad de dormir, sino la capacidad de dormir.

Dormir de noche permite que los centros nerviosos se carguen de fluidos vitales favoreciendo la vida al hacerla más armónica y a la vez longeva porque retarda el envejecimiento. Los ciclos sueño/ vigilia están controlados por nuestro reloj biológico o ritmo circadiano y a medida que envejecemos nuestro reloj biológico se adelanta.






 
El sueño en la persona adulta mayor sufre cambios en la continuidad, duración y profundidad, propios del envejecimiento, por lo cual generalmente el adulto mayor considera su sueño poco satisfactorio. También una gran proporción de ellos sufren enfermedades crónicas, consumen fármacos, enfrentan situaciones psicológicas y sociales que pueden afectar su sueño. Así, se ha encontrado que entre la tercera parte y la mitad de las personas mayores de 65 años tienen algún tipo de problema para dormir e incluso una cuarta parte tiene serias dificultades, siendo el insomnio el mayor problema.

Todos estos eventos afectan la calidad de vida, trastornan la relación y pueden alterar el desempeño de las actividades cotidianas. Por lo tanto, el sueño adecuado por las noches es una de las principales necesidades del adulto mayor para mantener una vida activa y saludable.

 

CAMBIOS FISIOLÓGICOS DEL SUEÑO EN EL ADULTO MAYOR
Numerosos estudios han demostrado cambios relacionados con la edad con la continuidad, duración y profundidad del sueño. Estos cambios ocurren en personas sanas y no están relacionadas con las enfermedades. Sin embargo, existen diferencias individuales en la calidad de sueño.

-Entre los principales cambios se encuentran:

-Disminución en la cantidad y duración de sueño.

-Las siestas diurnas aumentan

-Aumento de la cantidad de sueño ligero y una disminución de la cantidad de sueño profundo.

-Se levantan temprano por las mañanas.

-Cambios frecuentes de un estado de sueño a otro.

-El adulto mayor es más sensible a los cambios de horario.

Dentro de sus repercusiones, la privación del sueño puede provocar varios síntomas y enfermedades, como pérdida de la memoria a corto plazo, reducción de la capacidad de atención, concentración, disminución de coordinación motora y la capacidad de adaptación, irritabilidad, fatiga, intranquilidad, desorientación, confusión, depresión, apatía y somnolencia.

En el proceso de envejecimiento existen factores que pueden influir en el sueño directa o indirectamente. Las influencias directas afectan al sistema nervioso y los mecanismos fisiológicos (ritmo cardiaco) relacionados con: la continuidad, duración y profundidad del sueño que ocurren en la persona sana.

El uso indiscriminado de medicamentos también producen insomnio y vigilia excesiva, todos estos factores estarían afectando la calidad del sueño del adulto mayor.

El insomnio es uno de los trastornos más frecuentes en los adultos mayores, el cual se define como una disminución sostenida de la cantidad del sueño habitual, usualmente es de etiología multifactorial y puede verse asociado a cambios en el horario de acostarse, enfermedades crónicas y enfermedades mentales.






Fuente :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo IX"
-Cartilla 9 "AUTOCUIDADO DEL SUEÑO EN LAS PERSONAS ADULTAS MAYORES"

jueves, 9 de mayo de 2013

AUTOCUIDADO PARA PREVENIR Y TRATAR EL ESTREÑIMIENTO


 
 
 
El manejo del estreñimiento depende de la causa subyacente. A falta de problema de fondo orgánico en los adultos mayores, se debe orientar sobre las medidas dietéticas, ingesta de líquidos, ejercicios y reeducar la función del intestino, como a continuación se detalla.


MEDIDAS PARA PROMOVER LA ELIMINACIÓN INTESTINAL
Recordar que el promedio normal de las deposiciones son aproximadamente de cada uno a tres días.
 
 DIETA
 
A) Aumente los alimentos ricos en fibra.
B) Antes del desayuno tome algún liquido caliente. Los líquidos calientes tomados antes del desayuno actúan como estimulante del peristaltismo.
C)  Evite los alimentos altos en azúcar y harinas refinadas, como pasteles, pasta.  Los alimentos refinados producen heces duras y pequeñas que aumenta la susceptibilidad  del colon a la enfermedad.
 
 INGESTA DE LÍQUIDOS
 
Se recomienda que ingiera entre 1500 a 2000ml. De líquidos al día (agua o jugos) para promover una consistencia adecuada de las heces y mantener los patrones intestinales. Esta cantidad debe aumentar en verano. La ingesta de líquido estará condicionada al estado de salud del adulto mayor.
 
EJERCICIOS
Camine y realice ejercicios, con especial énfasis en los ejercicios de fortalecimiento abdominal. Puede caminar durante 15-20 minutos después del desayuno. El ejercicio estimula el peristaltismo.
 
 LAXANTES
Evite el uso de laxantes o enemas. Solo úselos por prescripción médica. Su abuso daña la mucosa intestinal e inhibe el funcionamiento intestinal normal. Así mismo, evite el uso de aceite mineral. Esto puede interferir con la absorción intestinal de las vitaminas.
 
REEDUCACIÓN DEL INTESTINO
 
A)  Responda al deseo de defecar sin tardanza.
B)  Inicie una rutina que consista en intentar defecar a diario. Si usted tiene un ritmo regular diario con una hora en la que trata de defecar, lo mejor es mantener dicho horario no interrumpido de 10 a 20 minutos, aunque no tenga ganas de  defecar en ese momento. Si usted no tuviera un ritmo regular, los momentos más recomendables son después de 15 a 60 minutos del desayuno y después de la cena, para aprovechar la ventaja del estímulo después de las comidas. El establecer una rutina de defecación ayuda a su realización.
C)  Adopte una posición adecuada en cuclillas o sentado y relajado elevando los pies del suelo  o sobre un taburete bajo, mientras se inclina el cuerpo ligeramente hacia adelante. Puede   ser útil masajear la región abdominal, frotando hacia abajo el abdomen. Una postura adecuada permite la contracción voluntaria de los músculos abdominales, ayudando a la expulsión de las heces.
D) Evite los esfuerzos para defecar.
E) El ambiente será cómodo, tibio y privado y se eliminarán las alfombrillas deslizables, para la  seguridad del adulto mayor.
F) Utilizar siempre que sea posible el inodoro, el cual debe tener una altura adecuada. Mantener el inodoro en buen estado, pues si está sucio, tiene la tapa rota o no hay papel higiénico, puede inhibir la defecación.
G) Si persiste el estreñimiento a pesar de las medidas de las mencionadas consulte al médico o   a la enfermera del centro de salud.






Fuente :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo VIII"
 



miércoles, 8 de mayo de 2013

EL ESTREÑIMIENTO EN LA PERSONA ADULTA MAYOR


 
 
No cabe duda de que el estreñimiento, al menos subjetivamente es un problema que preocupa en particular a los adultos mayores. Sin embargo, una gran mayoría de adultos mayores se quejan de estreñimiento presentando un ritmo intestinal adecuado. Esto se debe a la escasa información sobre los patrones de evacuación normal. Si bien una deposición diaria es habitual, muchas personas sanas defecan dos o tres veces por semana.

 
La deposición diaria puede llegar a convertirse en una auténtica obsesión en la persona mayor, produciendo grave ansiedad. Así mismo, se dedican tiempo, energía y dinero a encontrar el modo de mantener un patrón intestinal “normal”.

 

No existe una definición congruente  en la literatura médica que proporcione de manera práctica lo que implica este problema, pero una definición un poco más cuantitativa, incide en que la persona presenta menos de tres evacuaciones a la semana, realizadas con esfuerzo. El estreñimiento aumenta con la edad.

 

El termino estreñimiento indica también dureza de las heces y una sensación de evacuación incompleta. La persona tiene sensación de plenitud abdominal, de indigestión y cuando consigue evacuar algo, las heces son duras, redondas y pequeñas.

 

Las alteraciones en la función intestinal de los mayores puede atribuirse a una combinación de factores como el envejecimiento, descenso de la movilidad y actividad física, la dieta, las enfermedades y las prácticas terapéuticas. Aunque durante el envejecimiento se producen cambios definitivos, el intestino suele mantener su homeostasis en el adulto mayor sano, a menos que se enfrente con un agente estresante.

 

Considerando que el estreñimiento es una incomodidad, puede tener consecuencias graves, como la impactación fecal o la ulceración. Así mismo, dadas las implicancias fisiológicas, psicológicas y sociales en los mayores, no debe pasarse por alto, atribuyéndose al envejecimiento. Por lo tanto, el adulto mayor y sus familiares pueden precisar educación sobre la eliminación intestinal, considerando las medidas preventivas y manejo del estreñimiento.

 



Fuentes :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo VIII"
 

CUIDADO Y MANEJO EN ADULTOS MAYORES INCONTINENTES




Es importante el tratamiento de la incontinencia urinaria, ya sea médico o quirúrgico.  En los enfoques conductuales para el tratamiento de la incontinencia urinaria, antes de llevar a cabo las técnicas de reeducación se debe tener en cuenta los siguientes principios: La continencia es una reacción aprendida ante un mecanismo fisiológico.

Convicción por parte de quien la aplique de que la situación puede mejorar, explicar reiteradamente de forma amigable lo que está haciendo y los propósitos que se persiguen. Estimular cualquier iniciativa que muestre el adulto mayor, reconocer con palabras afectuosas cuando el adulto mayor consiga llevar a cabo el comportamiento deseado y repetir regularmente el comportamiento que debe aprenderse. La ventaja de este enfoque es que no es invasivo y no presenta efectos colaterales. Y si no se obtiene la solución total, sí se alcanza una mejoría de la calidad de vida. El tratamiento requiere motivación y compromiso por parte del cuidador, la familia, o personal de salud y del propio adulto mayor. Dentro de las técnicas tenemos la reeducación de esfínteres y los ejercicios pélvicos.


REEDUCACIÓN DE ESFÍNTERES O REENTRENAMIENTO VESICAL


Su finalidad es llevar al adulto mayor a un patrón miccional más normal y cómodo, acostumbrando a la vejiga a evacuar con un determinado ritmo. Es más indicado en la incontinencia funcional.

El plan debe ser individualizado para cada paciente, teniendo en cuenta los hábitos vesicales, la ingesta de líquidos, el estado mental, el entorno social, la relación con la familia y la actitud del adulto mayor ante el problema.

Conozca la periodicidad con que acude al servicio, usando un registro. Este registro debe utilizarse durante días, anotando cada vez que orine, tanto en forma continente como incontinente. Esto permite estudiar en qué momento se producen los accidentes y sus posibles causas. El registro ofrece una idea exacta de la efectividad de la reeducación y asegura la comunidad de los cuidados.

Vaya al baño, o sugiérale que es hora de ir al baño especialmente al levantarse, al acostarse, antes o después de las comidas y, también tras algunas bebidas como café o té, así como algunos medicamentos como los diuréticos.

Debe permanecer sentado en el inodoro durante cinco minutos, escuchando un grifo abierto. Si esto no es eficaz se invita a orinar cada dos horas, en principio solo durante el día, tenga ganas o no. Nunca debe ir antes del momento fijado y si tiene deseos de orinar, en lo posible debe aguantarse. Una vez que se haya adaptado bien al esquema de miccionar cada dos horas, aumente gradualmente los intervalos entre cada micción de 30 en 30 minutos, hasta lograr un modelo de micción normal de 3-4 horas. Tras conseguir la continencia durante el día, se intentará durante la noche (levantándose dos veces, siempre a la misma hora)

 
OTRAS RECOMENDACIONES PARA CONTROLAR LA INCONTINENCIA URINARIA EN LOS MAYORES

Las medidas que a continuación se detallan están propuestas en términos adecuados para que sean asumidas por las personas adultas mayores.

-Intente recuperar los hábitos en la micción, estableciendo una rutina simple y regular de eliminación. Es importante saber cuál es el momento en que el adulto mayor tiene una mayor predisposición a la incontinencia. Programe las horas de micción si es necesario con ayuda de un despertador con timbre de alarma.

-Orine antes y después de cada comida. Así mismo antes de acostarse.

-Elimine los obstáculos que puedan dificultar su desplazamiento y fácil acceso al baño.

-Evite o trate el estreñimiento que causa urgencia urinaria, que a su vez contribuye a la incontinencia urinaria.

-Contraiga los músculos antes de toser, coger peso, o realizar cualquier maniobra que aumente la presión intraabdominal.

-Evite sustancias irritables vesicales y diuréticas (bebida con cafeína, te, alcohol o bebidas con edulcorantes artificiales). La eliminación de los irritantes vesicales ayuda a reducir la urgencia, lo cual conduce a evitar la incontinencia.




Fuentes :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo VII"
 


martes, 7 de mayo de 2013

INCONTINENCIA URINARIA

Es la pérdida objetiva e involuntaria de orina y abarca desde el escape de unas cuantas gotas hasta la incontinencia total. La incontinencia aumenta casi siempre con la edad y es más frecuente en mujeres que en hombres.

 
Los tipos más comunes de incontinencia urinaria entre los adultos mayores son la de esfuerzo, la de urgencia, la de rebosamiento y la incontinencia funcional. Es importante tratarlas porque es responsable de infecciones urinarias u otras infecciones graves.


 
Los adultos mayores no siempre padecen de incontinencia urinaria, sin embargo, toda persona con este síntoma debe ser evaluada por su médico para tener que corregir o controlar el trastorno. Algunas investigaciones reportan que entre el 10% y 30% en la comunidad y de 35% a 50% en instituciones de cuidados crónicos padecen de incontinencia urinaria. Afortunadamente la incontinencia casi siempre se puede tratar y manejar y hasta curar.


CAUSAS DE LA INCONTINENCIA EN EL ADULTO MAYOR

Entre los cambios que ocurren e las vías urinarias con el envejecimiento tenemos:

*Debilidad de la musculatura vesical.
*Reducción de la fuerza a chorro de la orina.
*Aumento de la cantidad de orina residual.
*Descenso ligero de la capacidad vesical.
*Disminución del volumen necesario para la contracción vesical.
*Aumento de las contracciones vesicales involuntarias.
*Aumento de la excreción  nocturna.
 
A pesar de lo señalado anteriormente, los cambios funcionales relacionados con la edad no son suficientes para causar por sí mismos la incontinencia urinaria. Dentro de los factores causales más comunes están:

 
FACTORES FISICOS
*Por infección urinaria, que afecta más a las mujeres por la proximidad de la uretra al ano.
*Por aumento de la próstata, ocurre con la edad.
*Por pérdida del tono muscular del cuello de la vejiga (prolapso), en mujeres multíparas o que han sufrido algún tipo de cirugía ginecológica.
*En las mujeres, la disminución en las concentraciones de estrógenos después de la  menopausia afecta la musculatura del suelo de la pelvis y el apoyo esfinteriano.
*Por lesiones bajas de la médula espinal.
*Por diabetes insípida o embolias.
*Por inmovilidad.
*Enfermedades neurológicas: accidente cerebro vascular, parkinson, etc.

 

FACTORES PSICOLÓGICOS

*Depresión y ansiedad.
*Falta de intimidad y privacidad.
*Problemas de salud mental (confusión o demencia).
*Estrés.
*Desadaptaciones al medio, por cambios ambientales bruscos; hospitalización, cambio de domicilio, etc.

 
FACTORES SOCIALES O AMBIENTALES
*Dificultades de acceso al cuarto de baño y malas condiciones de la vivienda.
*Problemas ambientales, como no tener el inodoro cerca, uso de baños comunes, deficiente iluminación, etc.

 
OTROS
*Medicamentos: diuréticos que produce urgencia urinaria y aumento de la producción de orina, los sedantes – hipnóticos que enmascaran la sensibilidad, ocasionando relajación  muscular, los antihiper-tensivos relajan la musculatura vesical, etc.
 
 
 
 

 
Fuente :

-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo  VII"
 

AUTOCUIDADO NUTRICIONAL DE LAS PERSONAS MAYORES


CAMBIOS CORPORALES CON EL ENVEJECIMIENTO

A medida que tenemos más edad, en nuestro organismo se producen cambios, vamos perdiendo volumen corporal, a expensas principalmente de la pérdida de la masa muscular, los huesos se tornan débiles, nuestra talla disminuye y nos volvemos menos activos.

 
REQUERIMIENTOS: LO QUE NECESITA NUESTRO CUERPO

Los cambios en el cuerpo y la disminución de la actividad física van a producir variaciones en nuestras necesidades a la hora de nutrirnos. Las personas adultas mayores necesitan menos calorías y un poco más de proteínas que los jóvenes.

Las necesidades de vitaminas y minerales son mayores, esencialmente se necesita calcio, vitamina D y el complejo B, por lo que debemos comer alimentos que la contengan.
 
A veces, con la edad, sentimos poca sed o simplemente no tenemos sed, por eso es que podemos estar tomando poca agua, cuando en realidad necesitamos tomar más para cubrir nuestras necesidades. Aún si tenemos problemas de incontinencia, prostatismo, diarreas, no debemos reducir nuestro consumo de agua, salvo que el médico así lo indique.

 
ALIMENTACIÓN SALUDABLE

El tipo de alimentación tradicional en nuestro país, hasta hace pocos años, era una dieta abundante en alimentos de origen local como la papa, yuca, el maíz, la quinua, el mote. Las carnes eran escasas y  las frituras eran una manera excepcional de preparar comidas. Además se consumía menos sal, azúcar y si bebían más infusiones.

-Se debe incorporar frutas y verduras en abundancia cereales como maíz, trigo, cebada, arroz, avena, etc.; además de alimentos ricos en fibra.

-En las comidas deberá de estar incluidas diariamente  las verduras, hortalizas y  frutas.

-De preferencia consumir solo lo necesario y escogiendo los menos dañinos (aceites, la sal, el azúcar refinada, alimentos de origen animal de preferencia sin grasa)
 
-Consumir más agua, por lo menos 6 a 8 vasos por día. Salvo contraindicación médica.

-Se deben consumir más cereales, este tipo de alimentación ayudará a lograr un envejecimiento saludable y a mantener la buena salud en los adultos mayores.

Fuentes :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo VI"
-Cartilla 6 "Autocuidado nutricional de las personas adultas mayores"

domingo, 5 de mayo de 2013

LA NUTRICIÓN EN EL ADULTO MAYOR


 

L




a relación directa entre la alimentación y salud sigue totalmente vigente en esta etapa de la vida. Una nutrición bien orientada durante los años de la senectud puede promover y mantener la salud, retrasar algunos cambios del envejecimiento, prevenir las enfermedades y ayudar en la recuperación de las mismas con la disminución de la morbilidad en la vejez.

En lo fundamental, los mismos principios de nutrición que se aplican para los adultos sirven para el grupo de los adultos mayores. Sus necesidades nutritivas son igualmente precisas para el mantenimiento del organismo, considerando en esta etapa las necesidades calóricas y de los micronutrientes. Sin embargo, hay que tomar en cuenta las enfermedades que están asociados a esta etapa, como la hipertensión arterial, diabetes sacarina, arteriosclerosis, osteoporosis, obesidad, gota y cáncer; y los principales problemas dietéticos, como la anemia, desnutrición, obesidad, estreñimiento, escorbuto y deficiencia de vitamina D.

Entre los factores que intervienen en la nutrición del adulto mayor se encuentran los cambios propios del envejecimiento, los hábitos alimentarios que están muy arraigados, la actividad física, los estilos de vida, nivel de instrucción, las redes sociales y familiares, la actividad mental y psicológica, el estado de salud o enfermedad y restricciones.

El estado de nutrición de una persona de 70 años es un vivo reflejo  de su historia alimenticia. Es por ello que una correcta, adecuada y equilibrada nutrición es parte importante para el mantenimiento de la salud durante la vida y no será una excepción durante esta etapa.



CAMBIOS CORPORALES CON EL ENVEJECIMIENTO
A medida que tenemos más edad, en nuestro organismo se producen cambios, vamos perdiendo volumen corporal, a expensas principalmente de la pérdida de la masa muscular, los huesos se tornan débiles, nuestra talla disminuye y nos volvemos menos activos.
 


REQUERIMIENTOS: LO QUE NECESITA NUESTRO CUERPO
Los cambios en el cuerpo y la disminución de la actividad física van a producir variaciones en nuestras necesidades a la hora de nutrirnos. Las personas adultas mayores necesitan menos calorías y un poco más de proteínas que los jóvenes.
Las necesidades de vitaminas y minerales son mayores, esencialmente se necesita calcio, vitamina D y el complejo B, por lo que debemos comer alimentos que la contengan.

Fuentes :

-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo VI"
-Cartilla 6 "Autocuidado nutricional de las personas adultas mayores"

 

AUTOCUIDADO PARA LA SALUD BUCAL

-Cepíllese los dientes luego de cada comida.
-Si no puede cepillarse pida ayuda.      
-Utilice un cepillo adecuado de cerdas suaves y flexibles.
-Cambie su cepillo cáda tres meses.
- Evite en lo posible fumar.

 CUIDE SU ALIMENTACIÓN        
 -No exagere el consumo de dulces, su dieta debe ser balanceada.
 -Utilice hilo dental, nunca palitos de dientes, clips, etc.
  -Si le faltan algunos dientes, utilice una prótesis (dentadura postiza)

 ¿UTILIZA UNA PRÓTESIS (DENTADURA POSTIZA) ?
- Cuídela al igual que a sus verdaderos dientes.
- Lávela por lo menos tres veces al día.
- Úsela durante el día, pero NO la use mientras duerme porque sus tejidos deben respirar.
- Ponga la prótesis en un vaso con agua hervida fría todas las noches.
 
SI DETECTA ALGÚN SÍNTOMA QUE A CONTINUACIÓN SE DETALLA, ACUDIR AL ODONTÓLOGO
-Cuando se presenta dolor de muelas y/o encías.
-Cuando se sospecha que se tiene caries.
-Si las encías se ponen rojas, se inflaman o sangran.
-Si tiene mal aliento.
-Cuando los dientes se empiezan a mover.
-Si se presentan abscesos o infecciones en las encías. 
-Si hay sangrado de la cavidad bucal al cepillarse los dientes.
-Si existen lesiones producidas por la prótesis, tumores o aftas.
-Si siente que la prótesis se mueve o se cuelga.

Fuentes :
-Autocuidado de la salud para el adulto mayor "Modulo V"
-Cartilla 5 "Autocuidado de la cavidad bucal en  las personas adultas mayores"